viernes, 17 de enero de 2014

Castaño (Castanea sativa)Castaño "El Abuelo" El Tiemblo. Ávila



Castaño "El Abuelo" El Tiemblo. Castaño (Castanea sativa)ÁvilaExisten varios árboles en España muy añosos catalogados como "El Abuelo". Este castaño es uno de los más conocidos y quizás, el que más merezca el calificativo. Verle en directo, provoca sentir lo que es perder toda identidad, vigor y belleza. Solo existe ya la mitad de lo que debió ser un magnífico perímetro, siendo ya solo prácticamente corteza maltrecha y descompuesta. Pero, sin duda, no ha perdido ni un gramo de dignidad, ya que ha demostrado su inagotable esperanza y fortaleza durante toda su vida. Le rodean vástagos de diferentes edades, para recordar que la vida sigue dando vida, cuando la dejamos.

Si paralelizamos este equilibrio de vejez y dignidad con el ser humano, nos podremos dar cuenta de lo indigna que es nuestra sociedad, que aparta y hace de menos a aquellos que con gran experiencia y conocimientos, fueron los que lograron que disfrutemos de lo que ahora tenemos con su tesón, trabajo y esfuerzo. Sin embargo los apartamos y no les tomamos en cuenta a pesar de su gran experiencia. Deberíamos fijarnos en la sociedad japonesa, que aunque ahora lo está perdiendo, aún dignifica a sus mayores.
Espero que el ejemplo y la protección a este anciano del bosque sirva para replantearnos regresar a la dignificación de los que por ellos, somos lo que somos.

miércoles, 15 de enero de 2014

Álamos Negros, Chopos (Populus nigra) Rascafría. Madrid

Álamos Negros, Chopos (Populus nigra) Rascafría. Madrid

 Populus significa pueblo. Este es el árbol del pueblo por excelencia. Han sido plantados como ornamento en pueblos y ciudades por su alto impacto visual y la variedad de colores que engalanan la tierra.

Su arraigo a la tierra lo ejercen a través de sus tremendas raíces que le aferran fuertemente a la vida. Por eso crecen en las riberas de los ríos ya que entran en simbiosis con su entorno, pues necesitan abundante agua para vivir pero ceden su fuerza para sostener las tierras de las riberas impidiendo corrimientos y fuertes erosiones.

Cuando son vetustos son peligrosos para las edificaciones y su población  ya que las pudriciones de sus raíces son rápidas y pueden caer por efecto de vientos fuertes, alimentando una leyenda de accidentes que estadísticamente es, sin duda, menor de lo expresado.

Su efecto más lindo, es, sin lugar a dudas, en todas sus variedades, el aleteo de sus hojas en otoño, provocando un baile orquestado por las singulares sinfonías del viento. 

Fueron los impresionistas, y en mayor medida por el pintor que llevó esta tendencia pictórica, Claude Monet, con sus cuadros de naturaleza y campo, quienes llevaron a los álamos, más quizás, los blancos y temblones que los chopos, a su máxima expresión y aún hoy esos paisajes son visitados por miles de turistas, para observar a las musas de estos maestros del arte

Llevaba tiempo queriéndome parar, en el paseo colindante en Rascafría a la carretera de Cotos, a los maravillosos chopos que hace cientos de años engalanan esta población de la sierra madrileña. Dos son los fotografiados, pero existen cerca de la treintena de estos tamaños.

Grandes seres para un gran paseo

lunes, 13 de enero de 2014

Nogalón del Tío Eusebio. Nogal Común (Juglans regia) Espinoso de Compludo. León

Nogalón del Tío Eusebio. Nogal Común (Juglans regia) Espinoso de Compludo. León

 Después de observar estos seres, hoy abandonados a su suerte, debido a que estos pueblos fueron despoblándose de vecinos, lo que se me viene a la mente, es como hemos modificado nuestras valoraciones de las cosas. Hoy en día, sólo aquellos que apreciamos la naturaleza, sobre todo si tiene estos tamaños, podemos perder tiempo y dinero en ser parte de ellos, ya que cuando lo visitamos y fotografiamos nos llevamos parte de ellos en forma de recuerdos, energía y vida.

Pero antiguamente fue otra cosa. Hoy, aparecen en este paraje unas decenas de nogales, de lo que al parecer fueron unas fincas llenas de tan digno ser. Cómo se valorarían, que mucha gente vendió muchos ejemplares para comprarse casa en la capital. Hoy en dia, para mí valen mucho más, ya que el valor ecológico, que es el que perdurará, revaloriza dia a día su existencia. Fotografié muchos de ellos, apareciendo en las fotos, el más famoso y el más grande.
El nogal fue antaño muy apreciado por su madera y por la producción de nueces. Ambas propiedades sacaban en el primer caso de la miseria a las familias, y en el segundo, del hambre. Hoy las nueces que seguimos consumiendo siguen siendo un manjar, aunque ya no apreciamos su valor nutritivo. El valor de su madera, radica en su dureza, falta de porosidad y color de acabado al lijar y barnizar. De hecho todos llamamos color nogal a una variedad de tono muy característico.
Podemos valorar aún más especimenes muy grandes al saber que es uno de los árboles más delicados en sus primeros años de vida, recordándonos aquello de la alta mortandad infantil de otros tiempos. Cuando por fin se establece crece lento pero majestuoso.

Castaño anexo al Nogal






viernes, 10 de enero de 2014

Arce real (Acer Platanoides), San Felix de Arce. León

Arce real (Acer Platanoides), San Felix de Arce. León



Incluir un árbol que solo tiene 3 m de perímetro y 120 años, entre los seres que aparecen en este blog parece un poco absurdo, ya que existen miles, en las ciudades, de tamaños similares, pero este es especial por tres cosas.
La primera es que no es verdad que no sea un ejemplar increíble si tomamos los tamaños que consigue normalmente esta especie. Es prácticamente el doble de cualquier arce real grande que podamos encontrar.
La segunda es que es el único árbol que me ha encontrado a mí, ya que aunque lo conocía, no lo buscaba, ni buscaba nada el día que lo encontré.
Y la tercera y la más importante es que es un árbol de los llamados sagrados. Cuenta la leyenda, que aquel que lo toca con la mano derecha mirando a las montañas bercianas, y pide un importante deseo, siempre le es concedido. 
Y cuenta esta leyenda que siempre ha cumplido con su trabajo. 
Evidentemente ante este gran privilegio y a la vez reto, estuve varios minutos, siempre con la cabeza hacia las montañas nevadas, pensando que era lo mejor que podía pedir.
Primero pensé poder tener mucho dinero para poder ser libre de trabajos y esfuerzos. Después, tener para los míos gran salud y bienestar. Más tarde, terminé pensando en visitar mil sitios y tener mil experiencias nuevas. Pero me paré a pensar y reflexioné que tenía una vida plena y tranquila si valoraba lo importante que poseía y disfrutaba. Sin pensarlo dos veces, pedí a voces, mantener y disfrutar lo que tengo, ya que ya soy millonario en dinero si disfruto lo poco que tengo. Soy fuerte y sano, si procuro cuidar lo que hago, y cuando viajo, como lo hago con mi esfuerzo diario, lo valoro y disfruto como si fuese lo último que fuese a conocer.
Por tanto, el arce me concedió lo que más anhelaba. Simplemente lo que tengo.